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El legado de un sueño de paz: 32 años de La nueva revolución humana

El legado de un sueño de paz: 32 años de La nueva revolución humana

El legado de un sueño de paz: 32 años de La nueva revolución humana

Humanismo Soka

miércoles, 6 de agosto de 2025

miércoles, 6 de agosto de 2025

El 6 de agosto de 1993, aniversario del bombardeo atómico de Hiroshima –en 1945–, el maestro Daisaku Ikeda comenzó la escritura de su novela «La nueva revolución humana» en el Centro de Conferencias de Nagano, Karuizawa, y que luego de más de 25 años fue finalizada el 6 de agosto de 2018. En la misma, se plasman los esfuerzos realizados por Shin’ichi Yamamoto, pseudónimo del maestro Ikeda, por hacer realidad, como discípulo del maestro Josei Toda, la grandiosa visión del kosen-rufu (paz mundial) legada por su mentor, poniendo en práctica la filosofía de revolución humana en esta nueva época.

El 6 de agosto de 1993, aniversario del bombardeo atómico de Hiroshima –en 1945–, el maestro Daisaku Ikeda comenzó la escritura de su novela «La nueva revolución humana» en el Centro de Conferencias de Nagano, Karuizawa, y que luego de más de 25 años fue finalizada el 6 de agosto de 2018. En la misma, se plasman los esfuerzos realizados por Shin’ichi Yamamoto, pseudónimo del maestro Ikeda, por hacer realidad, como discípulo del maestro Josei Toda, la grandiosa visión del kosen-rufu (paz mundial) legada por su mentor, poniendo en práctica la filosofía de revolución humana en esta nueva época.

El 6 de agosto de 1993, aniversario del bombardeo atómico de Hiroshima –en 1945–, el maestro Daisaku Ikeda comenzó la escritura de su novela «La nueva revolución humana» en el Centro de Conferencias de Nagano, Karuizawa, y que luego de más de 25 años fue finalizada el 6 de agosto de 2018. En la misma, se plasman los esfuerzos realizados por Shin’ichi Yamamoto, pseudónimo del maestro Ikeda, por hacer realidad, como discípulo del maestro Josei Toda, la grandiosa visión del kosen-rufu (paz mundial) legada por su mentor, poniendo en práctica la filosofía de revolución humana en esta nueva época.

La novela se publicó en entregas sucesivas en el Diario Seikyo, periódico de la Soka Gakkai. La última de éstas concluyó el 8 de septiembre de 2018, aniversario de la histórica Declaración para la abolición de las armas nucleares, pronunciada por el segundo presidente de la Soka Gakkai, Josei Toda, en el año 1957. La nueva revolución humana consta de 6.469 entregas, y es la continuación de la novela de doce volúmenes titulada La revolución humana, escrita previamente por el maestro Ikeda, en la cual narra la historia del desarrollo de la Soka Gakkai bajo la dirección del maestro Toda.

En la introducción de La nueva revolución humana, el maestro Ikeda expresó: «Ciertamente, será un desafío supremo terminar de escribirla en esta existencia». [1] En ese momento, Ikeda tenía sesenta y cinco años, y anunció que la novela constaría de treinta volúmenes. Durante cincuenta y cinco años, libró una ardiente lucha por completar cada entrega, entre una agenda atiborrada de compromisos, incluyendo innumerables viajes al extranjero, y mientras batallaba con la enfermedad. Su inamovible decisión de legar al futuro un camino de esperanza y su profundo afán de infundir aliento en el corazón de cada lector, le permitieron completar este desafío colosal.

En el vigésimo aniversario del comienzo de la redacción de la novela (6 de agosto de 2013), el maestro Ikeda escribió un ensayo titulado «Nuestro brillante camino hacia la victoria: El vigésimo aniversario del inicio de La nueva revolución humana». A continuación, compartimos un fragmento del mismo:

«¡Ha llegado la época

de triunfar en todo! 

¡Desafíense jubilosamente

y tejan con hilos de oro 

el tapiz de su revolución humana!»

Hace veinte años que comencé a escribir en entregas consecutivas mi novela La nueva revolución humana (en agosto de 1993). ¡Cómo pasa el tiempo…!

El gran escritor alemán Johann Wolfgang von Goethe (1749-1832) escribió: “Lo que se diga de palabra deberá estar dedicado al presente, al momento; lo que se escriba dediquémoslo a lo lejano, a la posteridad”. [2] He escrito La nueva revolución humana, que podría denominarse la gran obra de mi vida, con el anhelo de dedicarla al lejano futuro del kosen-rufu y a la nueva época de la juventud Soka que seguirá nuestras huellas. Apoyado por el daimoku de mis queridos compañeros de fe de todo el mundo, sigo escribiendo esta saga triunfal sobre el maestro y los discípulos. Por esto, me siento hondamente agradecido.

Este mes volvemos a conmemorar los bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki, acaecidos respectivamente el 6 y el 9 de agosto.

El 6 de agosto de 1993, día en que comencé a escribir el primer capítulo de La nueva revolución humana, me reuní con el doctor N. Radhakrishnan, quien era entonces director del Gandhi Smriti y Darshan Samiti (Centro en Memoria de Gandhi). El encuentro tuvo lugar aquí, en el Centro de Capacitación de Nagano [en Karuizawa, prefectura de Nagano, Japón]. 

Antes de reunirnos, el doctor Radhakrishnan se había referido a la convicción de Gandhi, para quien el poder del espíritu superaba el poder de la bomba atómica, y había expresado su profundo elogio y apoyo a nuestro movimiento diciendo que cumplía una función vital, en la medida en que hacía surgir la fuerza del espíritu humano y la canalizaba en dirección a la paz.

En su “Declaración para la abolición de las armas nucleares”, que mi mentor dio a conocer el 8 de septiembre de 1957, siete meses antes de morir, dijo que las armas nucleares eran una amenaza diabólica contra la supervivencia del género humano y una expresión del mal absoluto; en esa ocasión, exhortó a los jóvenes del futuro a luchar por la abolición de estas armas perversas. Con el renovado deseo de hacer realidad esta visión de mi maestro, tomé el pincel y escribí el primer párrafo de La nueva revolución humana: “Nada es tan preciado como la paz. Nada produce tanta felicidad. La paz es el punto de partida más fundamental para el avance del género humano”.

La SGI, trabajando junto a amigos de todo el mundo, ha dado resueltamente el primer paso para alejar a la humanidad de la tragedia de la guerra y encauzarla hacia la creación de la paz.

Este verano, una vez más, nuestros sucesores del Departamento de Jóvenes están llevando a cabo diálogos por la paz, tanto en Hiroshima como en Nagasaki, y también en Okinawa [el único territorio del Japón que sufrió combates de infantería durante la Segunda Guerra Mundial]. La labor dinámica de los jóvenes, decididos a tender una amplia red de paz para mostrar que el espíritu humano es mucho más poderoso que la fuerza de las armas nucleares, es digna de elogio y nos llena de tranquilidad.

El doctor Radhakrishnan y yo tocamos diversos temas aquel día, veinte años atrás; entre ellos, el viaje a Nagano del gran poeta indio Rabindranath Tagore (1861-1941). En agosto de 1916, Tagore fue a la localidad de Karuizawa, en Nagano, donde dio una conferencia para un grupo de mujeres estudiantes, que, imagino, serían tan admirables como las integrantes de la División Estudiantil Femenina, quienes recorren el camino de su misión con sabiduría y vitalidad juvenil. En su discurso, aquel día, Tagore dijo: “Deben comprender que han nacido en el infinito, que pertenecen no a un lugar limitado de esta tierra, sino al mundo entero”.

Dentro de este universo eterno e ilimitado, hemos elegido nacer en este planeta y, como Bodisatvas de la Tierra, trabajar por la felicidad del género humano y por la paz mundial, para ayudar a liberar a los seres humanos del sufrimiento». [3]



CITAS

[1] IKEDA, Daisaku: La nueva revolución humana, Buenos Aires: Azul índigo, 2017, pág. 11.

[2] GOETHE, Johann Wolfgang von: Máximas y reflexiones, Obras Completas, Madrid: Aguilar, 1987, Tomo I, pág. 424.

[3] IKEDA, Daisaku: Nuestro brillante camino hacia la victoria: El vigésimo aniversario del inicio de La nueva revolución humana, publicado el 10 de agosto de 2013 en el Diario Seikyo, periódico de la Soka Gakkai.

© Humanismo Soka - 2024

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