Humanismo Soka
En una oportunidad, el maestro Ikeda alentó así a los jóvenes:
«¡Mis jóvenes amigos, campeones del intercambio, salgan valientemente al encuentro del pueblo y generen una marea de diálogo donde vibre la luz de la amistad!» [1]
A lo largo del mes de julio, el diálogo fue el protagonista de los encuentros semanales de jóvenes, que encendieron una luz que iluminó cada rincón del país, desde Jujuy hasta Tierra del Fuego. Semana tras semana, estas reuniones fueron espacios para profundizar la filosofía budista, intercambiar desafíos y experiencias de la vida diaria, tomar renovadas determinaciones y despertar a la misión única e irrepetible que cada joven posee. A su vez, estos intercambios permitieron profundizar los vínculos de amistad para avanzar en la revolución humana de cada participante.
«Cada uno de ustedes es un ciudadano del mundo y Bodisatva de la Tierra que practica y proclama el supremo principio de los «tres mil aspectos contenidos en cada instante vital». ¡A través de entonar Nam-myoho-renge-kyo —la Ley Mística que permea la vida y el universo—, perseveremos para elevar nuestro estado de vida y el de los demás, y trabajemos unidos para guiar a la paz a esta sociedad global! ¡Avancemos juntos, elevando nuestras voces de cálido aliento y canciones de victoria perpetua en nuestras comunidades, de hoy hacia el mañana!» [2]
El maestro Ikeda alentaba especialmente a los jóvenes a construir un estado de vida invencible, basado en la fe, y expresaba su convicción de que un joven que toma la decisión de abrazar y de practicar el budismo podrá, sin falta, promover un cambio positivo dentro de su familia, su lugar de trabajo y su comunidad. Es por esa razón que seguir entablando diálogo con la mayor cantidad de jóvenes acerca de nuestra práctica budista, constituye la manera más práctica y segura de avanzar en bien de la paz y de la felicidad para todo el género humano.
«¡Amigos del Departamento de Jóvenes, éste es el momento de dialogar con mayor convicción que nunca, con energía y valor, exponiendo nuestra luminosa y alentadora filosofía sobre la dignidad de la vida y la revolución humana! ¡Sean audaces en su iniciativa! Dedicarse resueltamente a la felicidad propia y ajena es la forma de vida más plena que pueda existir. Como dice el Daishonin, “Ninguno es tan preciado como los tesoros del corazón”[3]» [4]


CITAS
1- IKEDA, Daisaku: Jóvenes, pongan en marcha un enérgico oleaje de diálogo, traducción del artículo publicado el 16 de diciembre de 2010 en el Diario Seikyo, periódico de la Soka Gakkai.
2- IKEDA, Daisaku: Nuestra brillante revolución humana, publicado el 27 de junio de 2023 en el Diario Seikyo, periódico de la Soka Gakkai
3- Los escritos de Nichiren Daishonin (END), Tokio: Soka Gakkai, 2008, pág. 892.
4- IKEDA, Daisaku: Todo comienza con el espíritu de ponernos a actuar, publicado el 20 de diciembre de 2008 en el Diario Seikyo, periódico de la Soka Gakkai.