Humanismo Soka
En un tranquilo pueblo estadounidense, la rutina cotidiana se quiebra cuando un suceso inexplicable sacude a una comunidad entera. Un grupo de chicos, unidos por juegos, bicicletas y una amistad inquebrantable, se ve empujado a enfrentar un enigma que nadie más parece comprender del todo.
Stranger Things es una serie de ciencia ficción y terror ambientada en los años 80, en el pueblo ficticio de Hawkins, Indiana. La historia comienza con la misteriosa desaparición de Will Byers, un niño de 12 años, lo que desata una intensa búsqueda por parte de su familia, sus amigos y la policía local.
Durante la investigación, el grupo de amigos de Will conoce a Once (Eleven), una niña con habilidades psíquicas que escapó de un laboratorio secreto del gobierno. Pronto descubren que en Hawkins se han abierto portales a una dimensión oscura y peligrosa conocida como Upside down , de donde provienen criaturas sobrenaturales que amenazan al pueblo.
La aparición de una aquella niña solitaria, marcada por un pasado de experimentos y dotada de poderes fuera de lo común, abre la puerta a aquella realidad paralela, oscura y amenazante, que convive en silencio con el mundo conocido. Mientras adultos y niños avanzan por caminos distintos pero convergentes, Hawkins se convierte en el escenario de secretos ocultos, fuerzas invisibles y decisiones que pondrán a prueba el coraje de todos. Entre luces de neón, música ochentosa y una tensión constante, la historia retrata la lucha por proteger a los seres queridos.
Lo más impactante de esta primera tanda de episodios fue, sin dudas, el último capítulo. A lo largo de la temporada vemos a los protagonistas preparándose para enfrentar nuevamente a Vecna. La historia da a entender que, durante todos estos años, nunca dejaron de buscarlo. Hawkins se encuentra cercada por militares que están obsesionados con capturar a Once, y en medio de ese clima ocurre el secuestro de Holly, la hermana menor de Mike y Nancy. Toda la temporada gira en torno a su búsqueda y al plan para rescatarla y, finalmente, derrotar a Vecna.
En paralelo, comienza a desarrollarse una amistad más profunda entre Will y Robin. A través de esa relación, la serie abre la puerta a una de las escenas más emotivas y significativas de la temporada.

Temporada 1 vs. temporada 5: el crecimiento de los personajes que se ve reflejado en Stranger things. (Imagen: Netflix).
El despertar de Will
En la última temporada, Will es presentado como alguien que todavía vive a la sombra del trauma de la primera temporada, cuando fue capturado en el Upside Down. Se muestra inseguro, desconfiado de sí mismo, y con una madre sobreprotectora que, por miedo, evita que participe plenamente en las misiones que sus compañeros llevan adelante para derrotar a sus enemigos, en especial, de Vecna, quien se revela como mente maestra de los monstruos que atacan Hawkins. Sin embargo, esos mismos temores de Will esconden una gran clave narrativa: Will sigue sintiendo la presencia de su enemigo… y empieza a notar que también puede ver lo que él ve. Y algo aún más increíble: puede influir en su mente. Eso que él siempre había interpretado como un defecto, una especie de «marca oscura», se revela como una virtud excepcional.
El momento decisivo llega en una charla con su amiga Robin quien identifica la inseguridad más íntima de Will: el miedo a aceptar quién es realmente. Es como si sus palabras activaran en Will todas sus potencialidades dormidas, cuando le dice: «Yo buscaba respuestas en otra persona pero… yo tenía todas las respuestas. Solo tenía que dejar de tener tanto miedo. Miedo de quien era en realidad».
La historia de Will encarna, de manera casi simbólica, una enseñanza profundamente humanista: aquello que creemos nuestro «punto débil» puede convertirse en nuestra mayor fortaleza cuando lo miramos con valentía. El miedo, la inseguridad y la sensación de no encajar que lo acompañaron desde la primera temporada son justamente las puertas a su despertar interior. En el último capítulo estrenado hasta el día de la fecha, Will no obtiene un poder nuevo, sino que descubre que siempre lo tuvo.

¿Cómo terminará esta historia? Así se ve la escena final del cuarto capítulo de la quinta temporada. (Imagen: Netflix).
Avanzar con confianza y brillar tal cual somos
Esta idea dialoga con las enseñanzas del maestro Daisaku Ikeda, quien explica que, desde la perspectiva del budismo, cada persona posee una individualidad única, irrepetible, que solo puede florecer plenamente cuando confiamos en nuestra propia vida.
En el libro La sabiduría para ser feliz y crear la paz, el maestro Ikeda expresa:
«Nadie tiene absoluta confianza en sí mismo. De hecho, lo más normal es que la gente sea insegura. En muchos casos, los que hacen alarde de gran seguridad en el fondo son simplemente arrogantes, siempre se enfrentan con los demás, y son propensos al conflicto. Tanto el exceso como la falta de confianza son igualmente causas de infelicidad.
Lo importante es que brillen a su propio modo, que triunfen en sus actividades cotidianas y procedan con su vida de la manera que les resulte más natural y apropiada. La individualidad real no pasa por las apariencias externas ni el “estilo”; es algo que el propio sujeto genera y manifiesta desde adentro. Alguien ha dicho que es un tesoro único, que solo uno posee. Tal vez a ustedes hoy les cueste saber exactamente cuál es ese tesoro, pero sepan que existe, que es de ustedes, y que no hay otra persona que pueda imitarlo. ¡Todos, sin excepción, poseen una individualidad irrepetible!
Después de todo, cada persona es diferente y singular. No hay ninguna necesidad de que se comparen con los demás; es la vida de ustedes. Lo que cuenta es qué sienten en verdad y qué piensan en lo más hondo de su ser. El budismo expone el principio de la floración de los árboles frutales: el cerezo, el ciruelo, el duraznero y el albaricoquero, cada uno florece exhibiendo sus propias características.
Las flores de cerezo son flores de cerezo, no son las de ningún otro árbol. Un capullo de cerezo nunca puede convertirse en una flor de durazno. Ni hay necesidad de que lo intente. Sería un tremendo despropósito que se propusiera dejar de ser lo que es. De la misma manera, cada uno de ustedes es un sujeto propio y distinto. Por mucho que lo deseen, no pueden ser otros. Lo que cuenta es que lleguen a ser personas capaces de apreciar, valorar, cuidar y alentar su propia vida valiosa e irremplazable.
Para eso, para llegar a revelar su budeidad innata tal como son, es fundamental entonar Nam-myoho-renge-kyo. La práctica del daimoku no solo les infundirá gran confianza en sí mismos, sino que también adornará su vida con la dignidad y el brillo más sublime y auténtico de su potencial.
Les pido que tengan total convicción en ustedes mismos, porque están viviendo la vida más noble y poseen el corazón más bello». [1]
CITAS
[1] IKEDA, Daisaku. (2022). La sabiduría para ser feliz y crear la paz, Buenos Aires: Azul Índigo, 2022, vol. 2, pág. 151.









