Humanismo Soka
Como héroes
que se esfuerzan
en bien del kosen-rufu,
cada uno de ustedes
es el orgullo de la SGI.
«Siempre hablé desde el fondo de mi corazón con todo aquel que encontré en el sendero de la vida. El camino se hace donde las personas transitan juntas…» [1] Son palabras de la famosa poetisa y activista social ucraniana Lesya Ukrainka (1871-1913).
Llevemos una existencia plena para abrir una senda de esperanza hacia el futuro mediante esfuerzos positivos, dialogando con los demás, creando nuevos amigos y consolidando una alianza de personas que compartan nuestras aspiraciones.
Nichiren Daishonin declara: «Oro, antes que ninguna otra cosa, para poder guiar y orientar al gobernante y a todos aquellos que me persiguieron». [2] Su estado de vida era tan elevado y abarcador, que incluso anhelaba ayudar a aquellas poderosas figuras que lo atacaban para que estas entraran en el camino de la iluminación.
Durante su exilio en la isla de Sado, donde debió enfrentar la amenaza constante de enemigos, el Daishonin forjó firmemente lazos perdurables entre mentor y discípulos con nuevos seguidores, como Abutsu-bo y su esposa, Sennichi; el sacerdote laico y la monja laica de Ko, entre otros.
En el Registro de las enseñanzas transmitidas oralmente, el Daishonin expresa: «Ahora que hemos ingresado en el Último Día de la Ley, Nichiren y sus seguidores actúan como buenos líderes y maestros». [3]
Somos miembros de la SGI y Bodisatvas de la Tierra quienes, como descendientes directos del Daishonin, hemos aparecido en esta época malvada, contaminada por las cinco impurezas, [4] para conducir a todas las personas hacia la felicidad.
En el Sutra del loto, los Bodisatvas de la Tierra aparecen ante el Buda, cada uno acompañado de una multitud tan numerosa como las arenas de sesenta mil Ríos Ganges. [5] Refiriéndose a este punto, mi mentor y segundo presidente de la Soka Gakkai, Josei Toda, dijo: «Nosotros también, sin la menor duda, hemos nacido en este mundo acompañados de una inmensa cantidad de compañeros. Con esta convicción, entonen el daimoku y esfuércense cada día por el kosen-rufu. De ese modo, comprobarán que tales acompañantes aparecerán, sin falta, uno tras otro, y se esforzarán a su vez por el kosen-rufu. ¡La valentía es la llave de la victoria!».
Hemos nacido en este mundo para llevar adelante nuestro desafío de propagar ampliamente la Ley Mística. En la misma medida en que extraigamos la valentía para hablar con los demás sobre la práctica budista y sobre el movimiento de la SGI, surgirán compañeros Bodisatvas de la Tierra que trabajarán junto a nosotros por nuestra noble causa. Incluso las personas que hoy se muestran reacias e indiferentes ante lo que digamos, podrán, a través de nosotros, formar una conexión con el budismo del Daishonin y, en el futuro, llegar a integrar nuestro círculo de compañeros y aliados.
El maestro Toda también dijo: «Porque vivimos en el mundo saha, en el que se pone a prueba nuestra resistencia, a veces tendremos que enfrentar momentos difíciles en el intento de transmitir nuestro mensaje; pero justamente por eso el beneficio que acumularemos a través de nuestro desafío será mucho mayor. Si se acercan a los demás y los abrazan basados en el espíritu de la fe de que uno representa personalmente a la Soka Gakkai, incluso aquellos con quienes les fue difícil relacionarse se transformarán en aliados y seguidores increíblemente firmes».
Quienes han triunfado especialmente en este desafío «vestido con la armadura de la resistencia», [6] son nuestros admirables miembros pioneros, integrantes del Grupo Muchos Tesoros.
Entre ellos, hay una integrante del Departamento Femenino de Amagasaki, en la prefectura de Hyogo (parte de Kansai), que se unió a la Soka Gakkai cuando era una joven (en 1955). Había enfrentado grandes dificultades y luchas después de la muerte de su padre, quien sucumbió a la enfermedad durante la Segunda Guerra Mundial. Posteriormente, integró la primera promoción del Kayo-kai de Kansai, un grupo de capacitación de jóvenes que establecí en septiembre de 1959. Luego de mucho esfuerzo, fortaleció su convicción de que el sendero de la paz se encuentra en la propagación de la filosofía del budismo de Nichiren Daishonin, y se dedicó enérgicamente a las actividades de Gakkai. En épocas más recientes, debió sobreponerse al dolor de perder a un hijo adulto. Y cuando un devastador terremoto sacudió Kobe y áreas vecinas en 1995, ella se dirigió sin vacilar a visitar y a alentar a los compañeros miembros que habían sido afectados por la catástrofe.
«En la Soka Gakkai, aprendí que tenemos la misión de transformar la sociedad, algo que cambió mi vida ciento ochenta grados. Quiero compartir la grandeza de la Ley Mística con toda la gente que me sea posible. Nadie podrá interferir en mi deseo de hacerlo», dice con una sonrisa, mientras sigue iluminando la vida de los miembros de su comunidad, como embajadora de la Soka Gakkai.
El desafío de lograr la comprensión de los demás sobre el budismo del Daishonin y su ideal de concretar una sociedad próspera y pacífica, basado en sus principios positivos, no es algo que esté separado de nuestra propia vida. Comienza y se propaga a través de nuestro «comportamiento como ser humano», [7] cuando tomamos conciencia de nuestra misión y nos ponemos de pie para llevarla adelante.
En su Comentario sobre el “Objeto de devoción para observar la vida”, Nichikan Shonin (1665-1726), conocido como el gran restaurador del budismo del Daishonin, escribe: «Cuando abrazamos la fe en este Gohonzon y entonamos Nam-myoho-renge-kyo, nuestra vida se transforma inmediatamente en el objeto de devoción de los tres mil aspectos contenidos en cada instante vital. Se convierte en la vida de Nichiren Daishonin». Dicho de otro modo, nuestra existencia, como practicantes dedicados al kosen-rufu, se verá impregnada a cada momento de sabiduría, valor, buena fortuna y beneficios, en unión única e indivisible con el Gohonzon (la Ley de Nam-myoho-renge-kyo) y con Nichiren Daishonin (el Buda eterno).
Ustedes son los embajadores de la SGI. Espero que hoy, una vez más, prosigan con su labor de ayudar a otros a establecer una conexión con el budismo del Daishonin, y allanen de ese modo el camino hacia un futuro de victorias.
¡Proclamen la Ley Mística!
Tal es la misión grandiosa
de su vida.
¡Lancen vítores clamorosos!
Pues de ustedes es la victoria eterna.
(Publicado en la edición de octubre de 2012 de Daibyakurenge, revista mensual de estudio de la Soka Gakkai).
CITAS
[1] Ukrainka, Lesya: Poems and Dramas (Poemas y obras de teatro), en World Literature Library [Biblioteca de Literatura Universal], Serie 3, vol. 157, Moscú: Belees-lettes, 1968, pág. 295.
[2] Los escritos de Nichiren Daishonin (END), Tokio: Soka Gakkai, 2008, pág. 423.
[3] The Record of the Orally Transmitted Teachings (Registro de las enseñanzas transmitidas oralmente), traducido por Burton Watson, Tokio: Soka Gakkai, 1996, pág. 18.
[4] Cinco impurezas: se refieren a las impurezas de la época, el deseo, los seres vivos, las ideas y la vida en sí. El término aparece en el capítulo «Medios hábiles» del Sutra del loto.
[5] The Lotus Sutra and Its Opening and Closing Sutras (El Sutra del loto y los sutras de inicio y de cierre), trad. por Burton Watson, Tokio: Soka Gakkai, 2009, cap. 15, págs. 252-253.
[6] END, pág. 413.
[7] END, pág. 893.